Se trata de un libro que abarca las principales actuaciones de un letrado en las denominadas diligencias previas del procedimiento abreviado, desde la atribución de un delito a un investigado hasta su transformación en procedimiento abreviado.
La presente guía va dirigida a abogados que ejercen en los Juzgados y Tribunales españoles. Analiza esta fase previa del procedimiento abreviado desde una perspectiva eminentemente práctica, contemplando el derecho a la defensa, el contenido de la misma, los órganos competentes de instrucción y enjuiciamiento, las partes procesales, acusadoras y defensoras. Destaca en el mismo el papel del abogado defensor en sede policial, ajustado a las reformas legislativas derivadas de las leyes orgánicas 5/2015 y 13/2015, así como de las leyes 4/2015 y 41/2015, consecuencia de diversas Directivas Europeas, normas que implicaron un importante cambio en el papel del abogado defensor en sede policial, con nuevos y amplios derechos para el investigado y su letrado, como el tomar conocimiento de los elementos esenciales para impugnar la detención y la entrevista reservada previa, medio para asesorar antes de cualquier declaración al investigado.
En cada una de las fases en que se divide, fase policial y fase judicial, se explica el papel que juega cada operador jurídico y aquello que afecta al abogado, ya sea acusador o defensor, lo que tiene que hacer en cada momento, los escritos que ha de presentar, el lugar que ha de ocupar en el Juzgado y lo que ha de decir en el mismo cuando le corresponda hablar.
Contiene una serie de modelos de documentos, los de uso más frecuente, que han ser redactados por los letrados en función de los intereses que defiendan, circunscritos a las diligencias previas, como escritos de designación, de personación, de denuncia, querella, petición de pruebas, solicitud de libertad y de recursos que caben en esta fase procesal, contra inadmisión de prueba y contra el auto de finalización de las diligencias previas. Son modelos utilizables en la generalidad de los supuestos, que como tales modelos deben adaptarse a las circunstancias de cada caso en que se pretendan usar.
También abarca el lenguaje jurídico propio de los abogados, la fraseología que se ha de utilizar en los distintos momentos, algo que no forma parte de los estudios de Derecho en las Facultades y que es propio o peculiar del foro.
En definitiva, como indica el subtítulo, pretende ser una guía para los abogados noveles, para que cuando tengan que intervenir no sufran los nervios de derivados desconocer su papel, modo de actuar, momento apropiado para hacerlo o escrito a presentar, y solamente pasen los propios del caso que han de defender.
